Los pasantes y danzarines de la Gran Tradicional Auténtica Oruro, entidad con 104 años de vida y con participación activa en el Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, ayer en señal de que la fe y devoción a la Virgen del Socavón está primero, decidieron peregrinar por las calles de la ciudad interpretando cánticos en honor de la Patrona de los Mineros.
Una vez que los músicos determinaron no acompañar el paso de los danzarines en el Primer Convite y convirtieron esta fiesta devocional en una marcha de protesta, los miembros de la centenaria agrupación folklórica, decidieron caminar hacia el Santuario del Socavón, intentando hacerlo por la ruta que hace más de 100 años recorrieron sus antecesores, a fin de evitar cualquier enfrentamiento con los músicos marchistas agresivos y que en medio de fuertes detonaciones avanzaban por otras calles.
“Nuestros abuelos y bisabuelos, lo hacían por devoción, sentimiento que se mantiene intacto en nuestra agrupación y es por eso que con o sin música, nosotros llegaremos a los pies de la Mamita”, dijo uno de las señoras de la cofradía, que encabezaba el grupo de danzarines, mientras en las manos llevaba flores de color naranja para depositarlas en el Santuario.
La diablada de los mañazos, como también se la conoce a esta agrupación folklórica, respetando el orden de sus bloques formados por niños y adultos, una vez que llegaron a la Avenida Cívica, lugar en el que en versiones pasadas se esmeraban por mostrar una brillante demostración, entonaron con más énfasis cánticos, ante el aplauso del público que en poca cantidad se había concentrado en el sector, aunque todavía sin entender que se presagiaba una jornada de sabotaje al Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
Siendo los primeros folkloristas en llegar al Santuario del Socavón, cerca de las 10:30 horas, también fueron recibidos con aplausos de feligreses que a esa hora participaban de la misa dominical y tras orar y recibir la bendición del sacerdote, pasaron de rodillas ante el altar de la Virgen del Socavón, prometiendo bailar en el Carnaval de Oruro 2009.
Una vez que los músicos determinaron no acompañar el paso de los danzarines en el Primer Convite y convirtieron esta fiesta devocional en una marcha de protesta, los miembros de la centenaria agrupación folklórica, decidieron caminar hacia el Santuario del Socavón, intentando hacerlo por la ruta que hace más de 100 años recorrieron sus antecesores, a fin de evitar cualquier enfrentamiento con los músicos marchistas agresivos y que en medio de fuertes detonaciones avanzaban por otras calles.
“Nuestros abuelos y bisabuelos, lo hacían por devoción, sentimiento que se mantiene intacto en nuestra agrupación y es por eso que con o sin música, nosotros llegaremos a los pies de la Mamita”, dijo uno de las señoras de la cofradía, que encabezaba el grupo de danzarines, mientras en las manos llevaba flores de color naranja para depositarlas en el Santuario.
La diablada de los mañazos, como también se la conoce a esta agrupación folklórica, respetando el orden de sus bloques formados por niños y adultos, una vez que llegaron a la Avenida Cívica, lugar en el que en versiones pasadas se esmeraban por mostrar una brillante demostración, entonaron con más énfasis cánticos, ante el aplauso del público que en poca cantidad se había concentrado en el sector, aunque todavía sin entender que se presagiaba una jornada de sabotaje al Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
Siendo los primeros folkloristas en llegar al Santuario del Socavón, cerca de las 10:30 horas, también fueron recibidos con aplausos de feligreses que a esa hora participaban de la misa dominical y tras orar y recibir la bendición del sacerdote, pasaron de rodillas ante el altar de la Virgen del Socavón, prometiendo bailar en el Carnaval de Oruro 2009.
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