“El Carnaval es orureño y será siempre orureño, porque sale del corazón del orureño y no de los intereses personales o de la política”, aseveró el obispo de la Diócesis de Oruro, Monseñor Cristóbal Bialasik, durante la celebración eucarística en honor a la Virgen de la Candelaria y la presentación de Jesús como la Luz del Mundo.
Ayer, el pueblo orureño asistió a la misa, en honor a la Virgen de la Candelaria, presidida por el obispo, en la que estuvieron también todos los religiosos, que también conmemoraron su día.
Durante la ceremonia, Monseñor Bialasik destacó la devoción del pueblo orureño a la Virgen del Socavón, que comenzó con la veneración de los mineros a través de la peregrinación y la danza y, hoy se constituye en una de las manifestaciones más reconocidas a nivel mundial, pues el Carnaval de Oruro, fue declarado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
“Esta manifestación tan hermosa que surge del corazón de los mineros y de cada bailarín, que hoy viene de distintos lugares de nuestra patria y del mundo entero, no se le puede quitar a nuestro pueblo, es la devoción, luz y fe que se refleja en esta peregrinación tan colorida que expresa nuestra cultura”, señaló Monseñor.
Por lo que pidió que “la Virgen María nos ayude a proteger nuestra dignidad orureña, nos ayude a desarrollar esta profunda devoción, siguiendo juntos la Luz de Cristo, que nos ilumina en la oscuridad de este mundo”, indicó.
Afirmó que el Santuario del Socavón está abierto para todo el mundo, “para la gente del Altiplano, de los Valles, llanos y de todo el pueblo boliviano”, porque “la Virgen María, desde su origen es la defensora de los orureños y de todos quienes visitan esta tierra”.
Luego de la misa, en la que todas las personas sostenían un cirio como signo de aceptación de Cristo como la Luz del Mundo, grupos musicales cantaron a la Virgen de la Candelaria, también conocida como al Virgen del Socavón, Patrona de los mineros y Reina del Folklore de Bolivia.
Ayer, el pueblo orureño asistió a la misa, en honor a la Virgen de la Candelaria, presidida por el obispo, en la que estuvieron también todos los religiosos, que también conmemoraron su día.
Durante la ceremonia, Monseñor Bialasik destacó la devoción del pueblo orureño a la Virgen del Socavón, que comenzó con la veneración de los mineros a través de la peregrinación y la danza y, hoy se constituye en una de las manifestaciones más reconocidas a nivel mundial, pues el Carnaval de Oruro, fue declarado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.
“Esta manifestación tan hermosa que surge del corazón de los mineros y de cada bailarín, que hoy viene de distintos lugares de nuestra patria y del mundo entero, no se le puede quitar a nuestro pueblo, es la devoción, luz y fe que se refleja en esta peregrinación tan colorida que expresa nuestra cultura”, señaló Monseñor.
Por lo que pidió que “la Virgen María nos ayude a proteger nuestra dignidad orureña, nos ayude a desarrollar esta profunda devoción, siguiendo juntos la Luz de Cristo, que nos ilumina en la oscuridad de este mundo”, indicó.
Afirmó que el Santuario del Socavón está abierto para todo el mundo, “para la gente del Altiplano, de los Valles, llanos y de todo el pueblo boliviano”, porque “la Virgen María, desde su origen es la defensora de los orureños y de todos quienes visitan esta tierra”.
Luego de la misa, en la que todas las personas sostenían un cirio como signo de aceptación de Cristo como la Luz del Mundo, grupos musicales cantaron a la Virgen de la Candelaria, también conocida como al Virgen del Socavón, Patrona de los mineros y Reina del Folklore de Bolivia.
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