Los integrantes de la Gran Tradicional Auténtica Diablada, ayer presentaron una bandera labrada en plata que data de hace 96 años, la cual perteneció a los tatarabuelos del actual presidente vitalicio de ese conjunto folklórico, Demetrio Alcalá.
“Es un orgullo portar en esta oportunidad esta reliquia que perteneció a mis tatarabuelos y que después de muchos años volverá a Oruro para ingresar junto a la Diablada, el Sábado de Peregrinación”, dijo Acalá.
Según la reseña histórica que hizo Alfonso Nina Carpio, integrante de la diablada de los Mañasos, esta joya fue hecha para la localidad de Toloma distante a 35 kilómetros de la ciudad.
Según la inscripción, que de forma textual transcribimos, la bandera fue donada a devoción del señor “Mariano Ramos y Bictoria Acarapi”, el 6 de enero de 1913 e incluso se señala en la misma bandera, que el importe de esa obra, fue de 132 bolivianos de ese entonces.
En el centro se tiene la imagen de la Virgen del Socavón y dos ángeles que sujetan unos lienzos en los que está inscrito “O Birguen del Socabón”, asimismo, más abajo se encuentran otros dos ángeles portando los inciensarios.
“Como se puede observar en esta reliquia se usa la letra B para escribir las diferentes palabras y la N para escribir inporte”, dijo Nina.
Afirmó que los mañansos llegaron a Oruro con la comercialización de carne de res, cuando estaba en auge la minería, entonces, éstos cada año en la fiesta de Reyes que se celebra en Toloma, donde también se venera a la Virgen del Socavón, regalaban una joya de plata a la Virgen, lo que denominaban obrar a la Virgen.
Y fueron Mariano Ramos y su esposa que obraron esa bandera que tiene una dimensión de 31.5 centímetros de ancho y 49 centímetros de largo.
Los integrantes de la diablada emparentados entre sí con los comunarios de Coloma, logran traer consigo esta joya a la ciudad de Oruro y la utilizan como símbolo de devoción a la Virgen del Socavón.
Entonces ofrecen una misa en el ahora Santuario del Socavón, después de la llegada de la fiesta de Reyes de la que no transcurre más de dos días, luego, el pasante del Carnaval de Oruro con la diablada de los mañasos, tiene en su poder la bandera y las otras joyas que le fueron donadas a la Virgen, hasta el Sábado de Entrada de Ceras y Cargamentos.
Estos pasantes y su comitiva llevan consigo la bandera de plata junto a la imagen de la Virgen del Socavón y después de este acontecimiento singular en la ciudad de Oruro, devuelven estas joyas a las autoridades de la localidad de origen Toloma, donde se guardan y custodian las mismas.
Después de los años sesenta la diablada deja de participar de la fiesta de Reyes y también dejan de traer a la ciudad esta bandera.
Luego de casi otra década, a iniciativa de la señora Marcelina Alcalá Ramos viuda de Coca, se sustituye a esa bandera, con otra de igual material que actualmente tiene como guía característica la gran Tradicional Auténtica Diablada.
“Es un orgullo portar en esta oportunidad esta reliquia que perteneció a mis tatarabuelos y que después de muchos años volverá a Oruro para ingresar junto a la Diablada, el Sábado de Peregrinación”, dijo Acalá.
Según la reseña histórica que hizo Alfonso Nina Carpio, integrante de la diablada de los Mañasos, esta joya fue hecha para la localidad de Toloma distante a 35 kilómetros de la ciudad.
Según la inscripción, que de forma textual transcribimos, la bandera fue donada a devoción del señor “Mariano Ramos y Bictoria Acarapi”, el 6 de enero de 1913 e incluso se señala en la misma bandera, que el importe de esa obra, fue de 132 bolivianos de ese entonces.
En el centro se tiene la imagen de la Virgen del Socavón y dos ángeles que sujetan unos lienzos en los que está inscrito “O Birguen del Socabón”, asimismo, más abajo se encuentran otros dos ángeles portando los inciensarios.
“Como se puede observar en esta reliquia se usa la letra B para escribir las diferentes palabras y la N para escribir inporte”, dijo Nina.
Afirmó que los mañansos llegaron a Oruro con la comercialización de carne de res, cuando estaba en auge la minería, entonces, éstos cada año en la fiesta de Reyes que se celebra en Toloma, donde también se venera a la Virgen del Socavón, regalaban una joya de plata a la Virgen, lo que denominaban obrar a la Virgen.
Y fueron Mariano Ramos y su esposa que obraron esa bandera que tiene una dimensión de 31.5 centímetros de ancho y 49 centímetros de largo.
Los integrantes de la diablada emparentados entre sí con los comunarios de Coloma, logran traer consigo esta joya a la ciudad de Oruro y la utilizan como símbolo de devoción a la Virgen del Socavón.
Entonces ofrecen una misa en el ahora Santuario del Socavón, después de la llegada de la fiesta de Reyes de la que no transcurre más de dos días, luego, el pasante del Carnaval de Oruro con la diablada de los mañasos, tiene en su poder la bandera y las otras joyas que le fueron donadas a la Virgen, hasta el Sábado de Entrada de Ceras y Cargamentos.
Estos pasantes y su comitiva llevan consigo la bandera de plata junto a la imagen de la Virgen del Socavón y después de este acontecimiento singular en la ciudad de Oruro, devuelven estas joyas a las autoridades de la localidad de origen Toloma, donde se guardan y custodian las mismas.
Después de los años sesenta la diablada deja de participar de la fiesta de Reyes y también dejan de traer a la ciudad esta bandera.
Luego de casi otra década, a iniciativa de la señora Marcelina Alcalá Ramos viuda de Coca, se sustituye a esa bandera, con otra de igual material que actualmente tiene como guía característica la gran Tradicional Auténtica Diablada.
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