Avezados loteadores “rematan” lotes de terrenos para viviendas en el lado Oeste del Calvario de Urkupiña, poniendo en riesgo la construcción de la Basílica Mariana, el mirador penitencial tripartito, varios proyectos turísticos y la imagen de ese sagrado lugar al que peregrinan anualmente más de medio millón de personas.
La denuncia fue oficializada por el secretario General del Sindicato Agrario Cotapachi, Cirilo Herbas, quien en carta enviada al Concejo Municipal de Quillacollo, denunció el loteamiento de tierras en el cerro de Cota o Calvario de Urkupiña, que tiene categoría de área protegida y Patrimonio Nacional mediante ley del Estado Plurinacional de Bolivia.
En la nota, el dirigente afirma que la serranía de Urkupiña es sometida a loteamientos ilegales desde hace más de 10 años por traficantes de tierras que se hacen pasar por dirigentes. Identificó a Severino Costana, Flaviano Meneces, Alejandro Rojas y otros como los causantes de la destrucción de ese patrimonio de los bolivianos.
Reveló que esos personajes proceden a los loteamientos bajo la figura de “regalo a todos los que quieran” en la continuación de Alto Cotapachi, lugar declarado como sitio arqueológico, turístico y ecológico, donde está prohibido construir viviendas.
Herbas denunció que el supuesto regalo o dotación gratuita forma parte de la nueva estrategia que ensayan los loteadores para consolidar urbanizaciones, y luego proceder recién al cobro por los terrenos.
En ese sentido, informó que los traficantes de tierras, el pasado 17 de julio, llevaron a los supuestos beneficiados al cerro de Cota, con una afiliación de Bs 50, donde procedieron a destruir los recursos forestales nativos y abrir caminos.
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