Pequeños y congelados, los globos se convierten en verdaderas armas para descargar la malicia, y en algunos casos, el morbo de jóvenes y adolescentes.
Las nalgas y los senos son, para algunos hombres, el blanco perfecto de los globos en Carnavales. “Cuando uno es joven no mide, no tiene conciencia. Recuerdo que cuando era joven, si no le dabas en los senos y las nalgas no tenía chiste, incluso algunos morbosos se acercaban a supuestamente reventarles el globo y era sólo para manosear a la chica”, relata un vecino de la zona sud, que prefiere mantener en reserva su identidad.
“Un ‘globazo’ en los senos es para las mujeres como una patada en los testículos a los hombres”, reprocha Mildred Jaldín, tratando de reflejar el dolor que representa esta situación.
Una joven, de aproximadamente 17 años, cruzaba la avenida Blanco Galindo, presurosa y temerosa de la velocidad que imprimen los vehículos. En medio de la carretera, fue sorprendida por un fuerte golpe en el vientre que la tendió al suelo.
Afortunadamente, el jeep que venía de frente, pudo frenar evitando un fatal accidente. Los testigos se percataron que un muchacho arrojó un globo desde la carrocería de un camión.
Como estas historias existen miles que dejaron huellas y pérdidas irreparables en las víctimas de personas que a título de “juego” agreden con brutalidad a terceras personas. Los días de Carnavales, principalmente en el Corso de Corsos, nadie se salva de este ataque sin control. Niños, adolescentes, embarazadas e incluso ancianos arrastran traumas de esta fecha con frases como “yo prefiero no salir de mi casa en Carnavales”.
El trauma llega a tal punto, que el vuelo de una paloma hace que algunas jóvenes se agachen y protejan, pensando que les lanzaron globos.
ORDENANZA Actualmente, la Comisión Tercera del Concejo de Cercado, elabora una ordenanza municipal que prohíbe el “juego” con globos en calles, avenidas y plazas de la ciudad.
La presidenta del Concejo Municipal, Ninoska Lazarte, explica que el principal motivo para dar celeridad a esta ordenanza son las reiteradas denuncias de víctimas que llegaron hasta el Concejo con historias desgarradoras y pérdidas irreparables, como la de un joven que perdió el ojo, la quemadura de la mano de una niña que cayó de la motocicleta con su padre y las complicaciones de embarazos.
La comisión debate sanciones a los infractores, entre ellas el arresto de 8 horas, multas económicas severas y, en el caso de que los infractores sean menores de edad, se considera el servicio social como una sanción moral.
La ley penaliza con cárcel
La premeditación y conciencia de los daños que pueden provocar las personas que “juegan” con globos permite aseverar que tales actitudes requieren la aplicación del Código Penal. En algunos casos, es necesaria la ayuda de psiquiatras, según la abogada y directora de la Oficina Jurídica de la Mujer, Julieta Montaño.“Si yo camino armado con globos convertidos en piedras, es porque lejos de querer jugar quiero causar daño y sufrimiento a alguien. No es un accidente, es un acto totalmente consciente y premeditado”, expresa Montaño.
Estos delitos están tipificados en el Código Penal como lesiones leves, graves, gravísimas, o lesiones seguidas de muerte e incluso tentativa de homicidio, con penas que van desde arresto de ocho horas hasta 8 años.
Montaño asevera que estas personas tienen un “gravísimo daño psicológico”. “El ‘juego’ que le llaman los jóvenes, no hace sino reflejar extremos de misoginia (odio enfermizo a las mujeres), que culturalmente se fortalece en Carnaval”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario