“Hoy celebramos la fiesta de nuestra Señora del Socavón, llamada también Virgen Candelaria porque lleva en su mano una candela encendida, diciendo, este niño que llevo en mi brazo izquierdo es la luz del mundo”, dijo.
De la celebración religiosa participaron varias congregaciones y devotos. La Virgen María reflejó un testimonio extraordinario de entrega y consagración, ella a pesar de haber tenido dudas personales, estuvo dispuesta a responder positivamente a los designios del Señor. “Cuando el ángel Gabriel se le presentó ella respondió, que se haga la voluntad del señor”, reflexionó monseñor.
La entrega de la Virgen María es la consagración hacia el Señor y la confianza que ella tuvo fue plena, por ese motivo se la venera con tanto fervor, cariño y fe, observado su imagen en todas partes, y recordando a la vez su entrega a Dios, afirmó.
Monseñor recordó que en vida el Papa Juan Pablo II, tomó la decisión de marcar en el calendario que el 2 de febrero se celebre la Fiesta de la Candelaria y la Vida Consagrada.
“Justo hoy todos los religiosos y religiosas celebran este día, no por hacer una fiesta más, sino para agradecer a Dios por la llamada que recibieron y la vocación consagrada que han hecho entregando su vida al servicio de Dios”, resaltó el obispo.
RELIGIOSOS
También pidió por las religiosas y religiosos, para que sean bendecidos cada uno de ellos y perseveren en su vocación y entrega, cumpliendo la misión que Dios les encomendó.
“Porque en muchos lugares su vida es muy difícil, entregada y olvidada por el pueblo, pero son personas que se sacrifican día y noche para servir a nuestro pueblo”, agradeció.
Y que los llamados por Dios, alumbren el camino de tantas personas que se perdieron en la oscuridad del mundo, “y que descubran que el Señor es el verdadero camino, la verdad y la vida. Cristo nos invita a descubrirlo y seguirlo para construir el reino de Dios”, concluyó la autoridad religiosa.
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