El espectáculo comenzó el Sábado de Peregrinación por la mañana, cuando se pudo apreciar a la diablada más antigua de todas, la Gran Tradicional Auténtica Diablada Oruro, en la que sus danzarines presentaron unos trajes impecables confundidos entre el juego de humos instalados en las diferentes máscaras.
En este conjunto folklórico se pudo apreciar la presencia del lucifer montado en un caballo, acompañado de una china en similar sistema de transporte y tres terneros por delante, como representación de la diablada de "los mañazos", llamando la atención con un ángel con alas negras, muy diferente al inmaculado personaje que por lo general comanda la tropa de diablos.
Por su parte, el conjunto Tradicional Folklórico Diablada Oruro, que en un número mayor al centenar y medio de danzarines, mostraron trajes donde predominó el color lila, además de las diablesas con las máscaras doble cara, que también dejó fascinados a turistas que se dieron cita para apreciar la Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, el Carnaval de Oruro.
La Fraternidad Artística y Cultural "La Diablada" no podía quedar de lado, expresando la fe a la Virgen del Socavón resaltando la excelente coreografía ensayada por tres meses antes de la entrada del Carnaval y que fue presentada en la explanada de la Avenida Cívica "Sanjinéz Vincentti" tanto el sábado por la tarde como el domingo que en horas de la noche, en medio de fascinantes fuegos artificiales brindaron un bonito espectáculo.
Es de mencionar positivamente, la participación de la Diablada Ferroviaria que como cada año ingresó con una de las mejores bandas de música de Oruro, la Espectacular Poopó, además de su iniciativa al presentar a todos los orureños y no orureños, la imagen de la Virgen del Socavón en tamaño natural y con los osos sobre monociclos que dieron un espectáculo aparte.
La Diablada Artística Urus, que tuvo de su parte el horario, demostró un "infierno", en la Avenida Cívica, la noche del sábado de peregrinación, ya que con las máscaras entremezcladas entre las chispas que lanzaban, y la excelente presentación de fuegos artificiales que dieron la impresión de estar en un verdadero infierno, motivaron a más de una persona a ser parte de esta diablada.
Otro aspecto que no se puede dejar de lado, son las bandas que acompañan a las diabladas, ya que ninguna se quedaba atrás.
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