Pese a la lluvia, la alegría primó en la despedida del carnaval

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Mucha gente llevó ponchillos para protegerse de la lluvia.
Como todos los años, el carnaval paceño se fue con una retreta y el entierro del Pepino. El acto, por segunda vez, se organizó en la plaza Mayor, donde la alegría de los presentes y el colorido de los bailarines contrastaron con los nubarrones que después se convirtieron en una granizada.

El acto no sólo contó con la presencia de adultos, ya que también estaban presentes jóvenes y niños. Todos ellos bailaron entusiasmados al son de las canciones interpretadas por la orquesta típica Recuerdos Vivos y el Movimiento Cultural Los Olvidados.

Minutos antes de que la orquesta comenzara a interpretar sus canciones de antaño, la gente gritaba “Hora, hora”, y cuando comenzó la actuación, algunos pocos salieron a bailar. El inicio del acto, previsto para las 10:00, se retrasó más de media hora.

La lluvia puso en aprietos a los camarógrafos que cubrían el evento, quienes apenas alcanzaron a proteger sus equipos de filmación y ponerse ponchillos.









Entre los danzarines estaban los personajes del carnaval paceño, como la Cholita paceña, el Ch’uta, el Pepino y la Reina del Carnaval de Antaño, quienes bailaron entusiasmados con personas del público, entre las cuales se podía apreciar a jóvenes, niños y unos cuantos turistas; algunos llevaban disfraces.

En el conjunto, se apreció mucho color, sombreros, pelucas, disfraces, serpentinas y debido a la lluvia, numerosos ponchillos de plástico.

La Cholita del Carnaval no sólo afirmó que “la vida es un carnaval”, sino también advirtió, sobre todo al público femenino, que se cuide del Pepino, pues éste acostumbra a “ver debajo de las polleras”; no en vano este personaje también es conocido como “Pepino chorizo sin calzón”.

Antes de concluir la fiesta en la plaza Mayor, decenas de “viudas”, cuyas lágrimas se confundían con las gotas de lluvia que caían sobre sus rostros, acompañaron el cortejo fúnebre del Pepino, quien fue conducido hasta la avenida Montes, para iniciar el recorrido hacia el Cementerio, donde sería enterrado hasta el próximo carnaval.