Miles de residentes bolivianos en Argentina, ataviados con trajes de morenos, caporales, kullahuas y otros, tomaron ayer las principales calles de la capital, Buenos Aires, en lo que el vicepresidente Álvaro García Linera interpretó como un intercambio de cultura preservando la identidad y la raíz de un pueblo.
Buenos Aires amaneció nublado pero con el pasar de las horas salió el sol. Las noticias en la televisión no hablan ni por asomo del “desfile folclórico” de la colectividad, todo gira alrededor de la salud de la presidenta Cristina, del accidente del gobernador de San Juan, José Luis Gioja y el asesinato macabro de una jovencita que estaba desaparecida y fue encontrada asesinada.
La difusión se concentró en la red social de facebook y en medios radiales de la comunidad boliviana, de los cuales sólo cuatro radios transmitieron el evento, aunque los presentadores decían que eran 40 a 50 emisoras.
El evento comenzó tarde, el desfile se puso en marcha a las 11:30 junto a la comitiva oficial organizadora compuesta por dirigentes de los folcloristas acompañados de la directora de RTP
Canal 4 Mónica Medina, quién fue fuertemente aplaudida.
La particularidad era que habían dirigentes bolivianos folcloristas llegados desde San Pablo (Brasil).
Una de las pocas pancartas reivindicaba como organizador al grupo político kirchnerista, Movimiento Patria Grande.
El acto protocolar empezó a las 15 horas con la llegada del vicepresidente Álvaro García Linera, junto a él estaban los candidatos a legisladores por el kirchnerismo; Daniel Filmus, Juan Cabandié y Jorge Taina, también se pudo divisar al secretario de cultura de la Argentina, Jorge Coscia; el viceministro de Turismo de Bolivia, Marcos Bankovic; el cónsul de Bolivia en
Argentina, Ramiro Tapia y el embajador de Bolivia en Argentina, Liborio Flores Fernández.
García Linera improvisó unos pasos de caporales de Boulogne, junto con su esposa Claudia Fernández tocó los platillos con las bandas, haciendo del deleite del público que aplaudía efusivamente. El Gobierno de Evo Morales ha puesto en marcha una estrategia de campaña para captar el voto de los inmigrantes bolivianos residentes en Argentina
Claves
1. Más de un millón de bolivianos están asentados en Argentina.
2. Evo Morales impulsa la ‘carnetización’ y empadronamiento con miras a las elecciones de 2014.
3. El Gobierno de Cristina Fernández otorgó amplias facilidades para la integración de los inmigrantes.
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