El pepino resucitó ayer y saltó de su ataúd con alegría, después de recibir un beso de la reina del Carnaval Paceño 2013, Maya Frías. Con esto y la llegada del ch’uta, el 31 de enero, se dio inicio al Carnaval Paceño.
“El pepino ha despertado gracias a un beso que le dio la reina. Cada año hacemos alegorías especiales”, señaló sonriente Javier Escalante, presidente de la Asociación de Comparsas del Carnaval Paceño, que organizó la actividad.
El acto oficial comenzó cerca de las 14.30. Antes de despertar, sus viudas, una banda, danzarines disfrazados de ch’utas y gente curiosa acompañaron un desfile fúnebre con el ataúd del pepino. La comitiva recorrió la avenida Baptista, la Monasterios hasta la Unidad Educativa Holanda, en la Entre Ríos.
Mientras se avanzaba, este personaje parecía resucitar, primero sacaba la mano derecha, con la que empezada a golpear a los que lo cargaban, luego se sentaba y volvía a desfallecer.
Al llegar a las puertas de la Unidad Educativa Holanda, la reina del Carnaval se acercó y le dio un beso, como en un cuento de hadas. Entonces, el pepino saltó del cajón y comenzó su tropelía.
“El pepino ya está suelto y vamos a vivir un Carnaval de película”, señaló Escalier. Entonces las viudas dejaron de llorar y comenzaron a bailar, junto a los danzarines y arlequines que amenizaron con tambores, en medio de la explosión de cohetillos y espuma.
El ch’uta había llegado para alegrar el Carnaval en una cabina de la Línea Roja del Teleférico.
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