Pese a la modernidad, las jóvenes comadres mantienen la tradición

Desde la mañana, las plazas de Tarija se llenaron de grupos de muchachas que ataviadas de los trajes típicos, aunque estilizados, compartían la celebración del Día de Comadres. Según las responsables femeninas del Gobierno Municipal, la juventud actual a la que, a pesar de la modernidad en la que está inmersa, le gusta mantener el orgullo chapaco

Celebración
La celebración se inició en la mañana con la habitual entrada de las comadritas, niñas entusiastas que se dieron cita en la avenida de la Integración para dar rienda suelta a su alegría danzando y copleando en grupos organizados y con coreografías ensayadas con antelación.
Cada conjunto se caracterizaba por colores distintivos, unas con la blusa purpura, la pollera verde y la mantilla negra, otras con los colores amarillo rosado y la manta blanca o amarilla que al compás de la caja y el erque hacían su paso por el palco oficial.
Según la coordinadora del evento, Alejandra Camacho, la fiesta de comadres actualmente depende de cómo los jóvenes quieran festejar porque se trata de compartir con las amistades, entregar la torta y a algunas les gusta solo por la fiesta, normalmente los jóvenes prefieren compartir en la fiesta con los amigos.
“Los jóvenes no lo toman tanto en el sentido tradicional, claro que hay algunos a los que les gusta, pero si se va a la plaza Luis de Fuentes, los jóvenes no van vestidos típicamente, más van como a una fiesta en el que las chicas tienen el chance de divertirse y poder excederse un poquito, aunque no lo veo que lo estén tomando de manera tradicional”, sostuvo.
Sin embargo, la secretaria de Fomento del Gobierno Municipal de Cercado, Martha Humérez, estableció que desde el Municipio la política es insistir en la preservación de la tradición y que significa incentivar a utilizar la vestimenta típica, cantar las coplas de la época y tocar los instrumentos propios de la temporada que son el erque y la caja.
Pero, según su opinión, con todo esto de la globalización y la modernidad, el adelanto en que ingresan las ciudades, las formas de participación crean nuevas formas de expresión y con seguridad las comadres ya no usan la vestimenta tradicional, pero sí la blusa, la pollera y la mantilla de manera estilizada.
Por ejemplo, destacó que a toda chapaca le gusta participar de la entrada de comadres y es inevitable que tenga que bailar la música típica de esta época y “a la juventud le gusta disfrutar de estas expresiones y se siente orgullosa cuando se pone la vestimenta típica, porque es un orgullo de identidad”.
“En esta época de comadres y compadres nos sale desde muy adentro todo lo que llevamos, el sentimiento a nuestra tierra, creo más bien que todavía, a pesar de que los jóvenes pueden tener ya otro tipo de mentalidad, se mantiene el orgullo de preservar nuestra tradición”, apuntó.
Por su parte, la responsable de Desarrollo Productivo Urbano, Roxana Romero, coincidió con Humérez al señalar que esta tradición de comadres en Tarija se mantiene, porque en las unidades educativas incentivan a los estudiantes a que preserven esta tradición y que es por eso que es visible la creciente participación de diferentes entidades educativas.
“Esta actividad de Comadres se mantiene porque a las jóvenes les gusta vestirse de manera tradicional, incluso de manera estilizada, les gusta cantar coplas y bailar la cueca, es una tradición que se mantiene”, argumentó.



Comadres, los lazos de amistad entrañables

“Según una participante que no quiso dar su nombre, ser comadre es ser amiga, compañera, hermana en quien confías y quieres compartir la fiesta de la vida.
Comadre es la yunta, aquella que te escucha, te enseña, te aconseja, a quien quieres y respetas, con quien te unen los lazos de solidaridad y reciprocidad.
Comadre es con quien construyes comunidad y te apoyas mutuamente para que los proyectos de la vida salgan adelante”