En una fiesta en la que se impuso el colorido de los trajes y la energía de sus danzarines, el Ministerio de Culturas y Turismo entregó, a tres de los seis municipios, una copia del título: Patrimonio Inmaterial de la Humanidad otorgado por la UNESCO a las danzas del Pujllay y el Ayarichi. El ministro Marko Machicao anunció el fortalecimiento de estas danzas en base a un plan de manejo.
Luciendo monteras de cuero, ponchos multicolores y ojotas de madera con espuelas, entre otras prendas típicas de la cultura yampara, más de una treintena de grupos de danzarines participaron en la Entrada del Pujllay 2015 que se realizó en la población de Tarabuco, como cada tercer domingo de marzo.
Este año fue singular, porque después de tres años de trámites a nivel departamental, nacional y luego internacional, las danzas del Pujllay y el Ayarichi fueron declaradas por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés), como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad y había que celebrarlo mostrando la esencia, particularmente de la primera danza, ya que el Ayarichi es típica de la fiesta de Todos Santos.
Miles de personas se dieron cita en Tarabuco, población distante a 60 kilómetros de Sucre, para observar la Entrada del Pujllay que recorrió desde la ex estación de trenes, ubicada en la zona norte, hasta la plaza central 12 de Marzo, a partir de las 10:00.
El ministro de Culturas y Turismo, Marko Machicao y el gobernador de Chuquisaca, Jaime Cárdenas, entre otras autoridades, presenciaron el espectáculo y aplaudieron a cada uno de los grupos que bailaron frente al palco en promedio de diez minutos.
Tras la conclusión de la Entrada, la celebración se trasladó a la zona sur del poblado donde se instaló una gigantesca Pucara en agradecimiento a la Madre Tierra por las bendiciones del anterior periodo productivo.
En este lugar, el Ministro de Culturas y Turismo entregó una copia del título otorgado por la UNESCO a las autoridades de los municipios de Sopachuy, Zudáñez y Tarabuco. No estuvieron presentes los representantes de los municipios de Presto, Yamparáez e Icla, donde también se bailan estas danzas.
“Esto (el título) significa para Bolivia un peldañito más para mostrar nuestras naciones, para mostrar nuestras culturas, para demostrar lo poderosa que es esta nuestra tierra y lo poderosas que son nuestras naciones. Tenemos la tarea ahora de seguir trabajando para que más danzas, más música, más monumentos, más historia, más cultura de nuestro país se proyecten al mundo”, manifestó Machicao.
Para mantener vivas, particularmente las danzas del Pujllay y el Ayarichi, el Ministro anunció la aplicación de un plan de manejo en base a cuatro pilares, elaborado por varias instituciones y organizaciones locales y nacionales.
“Por un lado hay que crear centros y espacios que tienen que ayudarnos a exponer la historia y el patrimonio que tenemos; luego una promoción y difusión a partir del civismo”, dijo Machicao al señalar que también se debe trabajar en la preservación y la autenticidad de las danzas, finalmente, en la proyección histórica de la fiesta de la cultura yampara.
Por su parte, el alcalde de Tarabuco, Gregorio Ignacio, en representación de los seis municipios yamparas, dijo que el título servirá para mantener la originalidad de sus danzas, ya que por ejemplo, el Pujllay comenzó a distorsionarse al ser bailado al son de bandas musicales, cuando debe ser al ritmo del pinquillo.
LA PUCARA
Como es tradicional en la cultura yampara, una Pucara de unos 12 metros de altura fue armada por el pasante de la fiesta, el gobernador de Cochabamba, Edmundo Novillo, quien, sin embargo, no pudo estar en la fiesta por motivos de salud y envió a cuatro representantes.
La Pucara fue armada prolijamente con toda la producción típica de Cochabamba; en la parte inferior se colocaron hortalizas, poco más arriba frutas, panes, enlatados, bebidas y en la cúspide carne de res; además se adornó con bolsas de hojas de coca y confites.
Todos los grupos de danzarines que participaron de la Entrada del Pujllay bailaron en torno a la Pucara, en una muestra de agradecimiento a la Pachamama.
La fiesta fue traspasada al gobernador de Chuquisaca, Jaime Cárdenas, quien, de acuerdo a la costumbre, el próximo año deberá armar una Pucara mucho más grande.
“Hemos traído un zapallo bien grande para el Gobernador de Chuquisaca”, bromeó el representante de la delegación de Cochabamba, Franulic Huanca.
Mientras que el Ministro de Culturas y Turismo bromeó señalando que “Novillo no pudo estar, pero mandó dos novillos”. La fiesta concluyó con el desarmado de la pucara, al caer la noche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario